miércoles, 17 de septiembre de 2014

JAIPUR, CAPITAL DEL RAJASTÁN

India, lunes 15 de septiembre


Última parada antes de llegar a Delhi, de dónde saldremos en avión para nuestro regreso a casa. Esta parada, que en principio no estaba prevista, ha sido muy divertida. Por recomendación, el día antes de salir de Madrid, de Sonia y Joaquín la incluimos en nuestra ruta en tren, Gracias a los dos!

Hemos podido dar un paseo por el casco antiguo de Jaipur donde todos los edificios guardan el "mismo" color, todo el barrio es un gran bazar y cada calle esta especializada en los diferentes productos que aquí se pueden comprar, no sin antes el ya común y duro regateo.


Por la tarde hemos ido al fuerte Amber, a las afueras de la ciudad. Aquí teníamos la intención de hacer montados en elefantes la subida al fuerte, parecíamos niños chicos de la ilusión que llevábamos durante todo el viaje de que llegara este momento. Pero... tuvimos que cambiar los planes, hace poco han cambiado el horario y ya sólo se puede hacer en la mañana y temprano.

Aún así no pasa nada, para cabezones nosotros, y cuando nos proponemos algo... Terminamos dando un paseo por el pueblo montados en estos enormes elefantes. Os dejamos algunas fotos más del día en Jaipur. 

Namaste.








lunes, 15 de septiembre de 2014

AGRA, HOGAR DEL TAJ MAHAL

India, domingo 14 de septiembre



Namaste,

A las 22:00 horas de la noche emprendemos nuestro camino a Agra. Esta vez en segunda clase. Cambio abismal al vagón donde dormimos ayer. Hoy tenemos aire acondicionado y las ventanas están aisladas del exterior, por lo que tan solo por los suaves tambaleos en las vías, apenas nos damos cuenta de que viajamos en tren. Sábanas y sólo dos camas por literas, y no tres. Un poco de cena con latas de conservas que nos donaron las gallegas antes de marchar de Calcuta y a poco más de las 23:00 horas a dormir, ya que estábamos bastante cansados del día. 

Nos hemos despertado a las 08:00 de la mañana, pero sin duda hubiéramos podido seguir un ratito más. Había que levantarse para recoger, ya que el tren llegaba a Agra a las 09:30 de la mañana. Una vez llegado a Agra, lo primero que hemos hecho ha sido ir hasta el hotel, donde hemos podido dejar nuestras mochilas y darnos una reconfortante ducha. Desayuno en un pequeño local recomendado por la Lonley Planet, con un sandwich de queso y tomate, un buen “black cofee” y “hoy chocolate”, un yogur con muesli y batido natural de mango. ¡¡Que bueno todo!!

Y por fin ha llegado el momento…teníamos muchas ganas de ver el Taj Mahal. Siempre lo habíamos podido ver en revistas y libros, y ahora sabíamos que lo teníamos a escasos 300 metros, pero las fachadas de las casas en las estrechas calles no nos permitían verlo. Nos hemos hecho 1000 fotos, de todas las posturas y perspectivas posibles. Ahora entendemos por qué es una de las siete maravillas del mundo. Impresionante en grandiosidad, impresionante por su blancura, impresionante por su simetría, impresionante por su historia. 

Dejamos el Taj, algunas comprillas en la multitud de puestos que se aglutinan alrededor de las puertas de acceso al monumento y después almuerzo/cena en una terraza de un restaurante con vistas al Taj Mahal. Aquí hemos podido disfrutar de un precioso atardecer, comiendo nuestra ya habitual comida hindú, mientras de fondo el silencio se irrumpe con los cantos de las mezquitas. 

Tempranito para el hotel, a las 5:00 de la mañana cogemos nuevo tren destino a Jaipur, donde llegaremos a las 9:30 de la mañana y disfrutaremos de una nueva ciudad que nos regala la India. 

Estamos muy bien. Disculpadnos si no damos mucha señal de vida, pero ya veís que el ritmo es algo acelerado, y el poco tiempo libre lo dedicamos para descansar algo. Un abrazo a todos, 


Namaste.









VANARASI, ESPIRITUALIDAD A ORILLAS DEL GANGES

India, sábado 13 de septiembre


Namaste, 

Hoy hemos emprendendido nuestro particular camino de vuelta. Pero aún nos quedan algunos días por delante, días que aprovecharemos para seguir conociendo la cultura hindú así como algunas de sus ciudades con más encanto. Hoy tocaba Vanarasi (en español la conocemos como Benarés), ciudad donde todo gira alrededor de su río sagrado, el gran Ganges. 

Hemos de contaros que el viaje hasta Delhi lo estamos haciendo en tren, en algunos casos aprovechando la noche para dormir en los vagones con camas. Primera anécdota en el primer destino. Todo estaba pensado para coger un tren a las 10:00 de la noche y llegar alrededor de las 9 de la mañana a Vanarasi. Habíamos reservado nuestros billetes para viajar en primera clase. Al sacar nuestros billetes tan sólo uno de nosotros tenía cama, el resto estábamos ocupando los tres primeros puestos de una lista de espera (así es cómo funcionan las reservas de tren en India). Nos contaron que la lista de espera corría bastante, y que no tendríamos ningún problema porque seguro que finalmente teníamos billetes. Pero no fue así… los días iban pasando, y la lista de espera no se movía… Ante la incertidumbre decidimos cambiar…. ya sólo quedaba la clase “Sleepers”, la más baja para dormir en cama dentro de los trenes en India. Nos tenía un poco preocupados el hecho de que cuando lo contábamos a los voluntarios que conocían dicha clase, todos se reían y nos decían “hay que hacerlo alguna vez, os vais a reír mucho, eso sí, llevaros cadenas”. Llegó el momento, a las 20:00 horas de la tarde salíamos de la principal estación de trenes de Calcuta, inmensa. Cogíamos un tren en el que llegaríamos a las 10:30 de la mañana a Vanarasi. La experiencia ha sido única. Cierto es que el ruido del tren al cruzarse con otros trenes en las vías, el claxon de los trenes al llegar a las estaciones o el sin fin de vendedores que suben y bajan del tren en las paradas para vender café, pan, dulces, agua…, no nos dejaba coger un sueño profundo, pero nos ha gustado haber disfrutado de esa indescriptible experiencia. Sin palabras el hecho de ver cómo se despierta India desde la ventana del tren cuando aún estás tumbado en la cama… Sin duda momentos que se quedarán grabados en nuestras retinas.

A poco más de las 11:00 de la mañana, el tren entraba a Vanarasi. Hemos dejado las maletas en una consigna en la estación, puesto que desde esa misma estación, a las 22:00 horas, hemos cogido un nuevo tren que nos llevará hasta Agra. Vanarasi, espiritualidad a orillas del Ganges. Un mismo país, pero una ciudad muy diferente a Calcuta. La mezcla de las diferentes religiones es aún más palpable, siempre predominando la hindú. Peregrinos hindúes acuden a los “ghats” del Ganges (típica imagen de la escalinata a orillas del río) para liberarse de sus pecados en sus aguas sagradas y también para incinerar a sus seres queridos. Es un lugar donde todo hindú quisiera morir, ya que expirar aquí supone la “moksha” (liberación del ciclo del nacimiento y la muerte), así que no es difícil encontrar gente moribunda en sus calles.

Queríamos conocer y vivir en directo el rito de la incineración, así que hemos visitado el ghat crematorio más importante de Vanarasi, el Manikarnika. No tenemos imagen del mismo, es evidente la prohibición de hacer fotos en estos lugares. Pero os podemos decir que han sido momentos estremecedores. Alrededor de estos ghats las familias pueden comprar la leña para incinerar a sus seres, eligiendo entre diferentes leñas de árboles dependiendo de la adquisición económica de las familias. Dejamos atrás multitud de hombres cortando y almacenando leñas y accedemos al ghat. Varias decenas de hogueras encendidas, algunas de ellas sólo rescoldos y cenizas. De repente, cánticos y oraciones irrumpen en la solemnidad del ghat. Cuatro hombres portan un cuerpo sin vida tapado por flores y mantas de colores, sobre un trono de cañas. Bajan hasta el río y sumergen el cuerpo en el Ganges hasta tres veces. Descubren parcialmente la cara y derraman agua sobre la boca del difundo. Sacan el cuerpo, lo preparan y lo colocan sobre una montaña de leña que acaban de encender. Sin comentarios. 

Alguna que otra compra, visita de otros ghats y paseo en barcaza por el Ganges. Desde aquí si se permiten las fotos, así que os dejamos alguna instantánea del ghat crematorio. A las 18:30, hemos disfrutado del rito del atardecer en otro de los ghats. Danzas y rituales a orillas del río, al que acuden numerosos hindúes y curiosos de todo el mundo. Día aprovechado en Vanarasi, llegamos al final. Vuelta en autorickshaw a la estación, recogida de maletas y partida en tren hasta nuestro siguiente destino… Agra.

Namaste












DESPEDIDA

India, viernes 12 de septiembre


Namaste,

Terminamos nuestra aventura en Calcuta. Despedida de las sisters, workers y resto de voluntarios. Habitual canción de agradecimiento en la Mother House de los voluntarios que son su último día, hoy nos tocaba a nosotros cuatro junto a una chica brasileña. Después despedida también en Daya Dam. Momentos emotivos para todos.

Sólo el último día las hermanas permiten realizar fotografías en las casas, así que hemos aprovechado el día de hoy para tomar algunas instantáneas de la casa de Daya Dam, de ahí que no hayamos podido subir imágenes del trabajo de estos últimos días. Esperemos que os gusten.

Namaste.










jueves, 11 de septiembre de 2014

¡HASTA PRONTO CALCUTA!

Namaste!

Nuestros días en Calcuta se acaban... Esa Calcuta que tan cordialmente nos ha acogido y dónde hemos disfrutado un montón. Pero todo lo bueno se acaba y ahora quedara asentar las experiencias vividas, que no son pocas.

Esta mañana hemos ido a visitar una leprosería donde acogen a muchas personas afectadas por esta enfermedad. A parte de tener un hogar también son tratados y rehabilitados, incluso les ponen prótesis en los miembros que han perdido, fabricadas en este mismo lugar. Además de las prótesis también tienen una gran cadena de producción artesanal de sandalias y de telares, donde hacen todo lo necesario para las casas, como los manteles o las sábanas, así como los bonitos saris de las hermanas. Os dejamos una foto de la fachada del centro, no podíamos hacer fotos en el interior.


El camino de vuelta se nos ha hecho eterno, en primer lugar el autobús que nos recogía llegó tarde y luego hemos pillado un atasco enorme dentro de una lata de sardinas como autobús y asados de calor...



Hoy a parte de esta visita hemos aprovechado para compartir la tarde con tres chicas gallegas que hemos conocido y que ya habéis podido ver en alguna que otra foto. Hemos almorzado juntos y después hemos ido al cine a ver una película de Bollywood. Os dejamos algunas fotillos del día:






En el trayecto de vuelta del leprosario hemos podido hacer fotos desde la ventana para enseñaros algunos ejemplos del uso de la bici en la India, un medio de transporte muy pero que muy utilizado.



Una cosa que nos ha llamado la atención estos días es que a pesar de la pobreza que encontramos en las calles, los hindúes son muy aseados y en cada esquina hay lugares acondicionados para el baño de las personas, como aquí podéis ver.



La presencia del tren se hace cotidiana en todos los lugares de la India.



Sí, la pobreza se palpa por dónde vas, desde las personas durmiendo y 
haciendo vida en la calle hasta las filas de chabolas en las riberas de los ríos.



Y antes de volver a casa a preparar la mochila para mañana, 
las últimas compras en Calcuta.

Hablando de mochila, mañana comenzamos el viaje de vuelta, no sin antes conocer un poquito más de la India. Por la tarde iniciaremos un viaje en tren de cuatro días a Delhi como auténticos mochileros, haciendo escala en Benarés, Agra y Jaipur. El día 16 llegaremos a Delhi para volar el 17 en el avión que nos llevará de vuelta. Es por esto que estos días no nos será nada fácil poder escribiros, no os preocupéis, intentaremos contaros lo antes posible.

Estamos muy bien y con pocas ganas de irnos, aunque también con ganas de repartir abrazos por España. De momento nos despedimos aquí hasta poder volver a conectarnos, un abrazo a todos y Gracias por vuestros comentarios y apoyo estos días, alegra saber de vosotros!

Namaste!